QUÉ ES EL JUDO ?
El JUDO es un Deporte Olímpico de lucha. Pero puede ser considerado como un Arte y como una Filosofía. La palabra JUDO se compone de dos términos, JU, que significa principio de la suavidad y de la amabilidad, y DO, que significa, la vía, el camino. Así, se considera que el JUDO es el camino de la suavidad.
Se practica por parejas y cada judoka intenta voltear hábilmente a su oponente cuando se encuentran de pie o de dominar y controlar el cuerpo del mismo cuando se lucha en el suelo.
Pero el JUDO no es simplemente una lucha. Tiene un transfondo ético y filosófico de considerable importancia, y es esto precisamente lo que le distingue de otros deportes de combate. Es un deporte muy educativo tanto para el desarrollo físico como para el desarrollo psicológico de los niños.
El JUDO es el camino mas eficaz para un fortalecimiento físico y mental tanto para niños como para adultos. Con el entrenamiento se disciplina y prepara el cuerpo y el espíritu; de esta manera, nos superamos a nosotros mismos y al mundo en el que vivimos.
A pesar de su gran eficacia, las técnicas de Judo se pueden aplicar dentro del marco de un entrenamiento o de una competición sin representar un peligro real para el oponente.
El espíritu del JUDO sobrepasa la noción del combate para dirigirse hacia otro objetivo:
El descubrimiento de uno mismo. La practica del Judo en un ambiente de armonía y convivencia, permite al alumno aprender a desarrollar progresivamente sus capacidades físicas y mentales.
Es así que la UNESCO, en 1996, ha reconocido al JUDO como «El Deporte Ideal para la Niñez», dado los valores formativos que el mismo presenta.
Con el Judo se pretende lograr un perfeccionamiento mental y espiritual a partir del dominio y conocimiento de nuestro cuerpo, lo que afianza la personalidad del practicante, dándole una gran
seguridad para enfrentar las distintas circunstancias de la vida.
Es recomendado por médicos y profesionales de diferentes Areas:
-Para personas con dificultades respiratorias (asma por ej.), por la variedad de técnicas especificas que se realizan en esta área de trabajo.
-Para personas sordas, por su beneficio en el sentido del Equilibrio, no sólo físico sino mental, agudizando su sentido de observación y otorgándole seguridad en si mismo y desenvoltura social.
-Para personas ciegas, por obtenerse los mismos beneficios que en el punto anterior, facilitando su práctica, por ser un deporte de contacto.
-Para personas obesas o delgadas, porque el entrenamiento les fortalece y ayuda con una alimentación correcta a lograr un desarrollo físico armonioso.
-Para niños con problemas de agresividad, hiperactividad, etc., porque el Judo logra atemperar su carácter y canalizar esa energía en un ámbito definido, con reglas claras.
-Para niños tímidos o introvertidos, porque el Judo les infunde mayor confianza en si mismos, afirmándoles en su personalidad e integrándolos en un ambiente de sana camaraderia .
-Para todo tipo de personas, cualquiera sea su edad, porque es un arte eminentemente de defensa, concebido para la protección ante un ataque no provocado.
En definitiva, el JUDO es recomendado, por su valor formativo psicológico y físico, por su valor de descarga energética y por su valor disciplinario que implica una filosofía de respeto permanente hacia sus semejantes.
COMO NACIÓ EL JUDO EN ARGENTINA
En 1905, se ponía fin a la guerra ruso-japonesa, prometiendo tranquilidad a los buques que se internaban en los mares orientales. La fragata Escuela “Presidente Sarmiento” realizaba su séptimo viaje de instrucción al mando del Capitán de navío Adolfo M. Días. El Capitán presencia en Yokohama un entrenamiento de Judo, el cual lo dejó impresionado por la eficacia.
Pidió autorización al Gobierno de nuestro país para traer contratado un Profesor de esa disciplina que se enseñaba allí en todas las instituciones militares y policiales. Y el Gobierno le concedió el pedido.
El Profesor contratado se llamaba YOSHIO OGATA, quien a los diez años había comenzado sus prácticas con el creador del Judo, Jigoro Kano. Contratado por nuestra Marina con el grado de Suboficial Primer Maestro de Armas, con sueldo por un año, viaja y estadía pagos. Yoshio Ogata emprende el viaje. La Fragata Sarmiento llegó a Puerto Militar (hoy Belgrano) el 29 de noviembre de 1906. Ogata sería entonces uno de los quince primeros japoneses que había en la Argentina.
Estuvieron alojados Ogata y su ayudante Watanabe (quien luego regresaría a Japón) durante un año en la Fragata, luego serían trasladados al depósito de la Marina en Retiro. Le era muy difícil comunicarse ya que no sabia castellano y lo hacía por medio de dibujos y con un precario inglés. Luego de un tiempo, fue contratado por el Comodoro Delcasse para que le diera clases particulares.
Ogata conoció muchas personalidades. Entre sus alumnos estaba el pionero de nuestra aviación, Jorge Newery. Enseñó en la Policía Federal y de la Provincia de Buenos Aires, en el Ejército Argentino en Campo de Mayo y en el Club Gimnasia y Esgrima. Falleció en Buenos Aires en 1970.
Entre 1928 y 1938, llegaron varios Maestros japoneses, entre ellos Tajuro Kumasawa y Hitoshi Nishizaka. De sus Dojos salieron afamados y excelentes profesores, difundiéndose el Judo en todo el país.
Durante el período que va desde 1946 a 1955, se van formando las primeras organizaciones formales del Judo argentino, como la Asociación Argentina de Judo, luego denominada Confederación Argentina de Judo –CAJ-, actual ente rector de nuestra disciplina deportiva en Argentina y a la cual están afiliadas las Federaciones de todas las Provincias.
De 1955 a 1971, llegan otros Maestros japoneses, que afianzaron la difusión del Judo en todo el país, como Yoriyuki Yamamoto, Sadamitsu Yamashita, Hideki Soma, Yoshiro Matsumura.
COMO NACIÓ EL JUDO EN FORMOSA
En el año 1960, llegó a Formosa el Profesor Ricardo Fernandez, procedente de Saenz Peña –Chaco-, contratado por la Escuela de Cadetes de la Policía de Formosa, para hacerse cargo de la Cátedra de Defensa Personal de la institución.
Simultáneamente, abrió el Gimnasio “Fujiyama” en donde comenzó a dictar clases de Judo.
Fue el iniciador del Judo en Formosa, El Profesor Fernandez sentó las bases de una disciplina de gran ductilidad y riqueza técnica, y éstas características transmitidas a través de los años, son distintivas del judoka formoseño.
Luego, por razones laborales, derivó la responsabilidad de la enseñanza del Judo en uno de sus alumnos, el profesor Marciano Eduardo Céspedes. Éste fue el formador de muchos docentes que enseñan la disciplina de Jigoro Kano en Formosa.
Ante la necesidad de insertar al Judo de Formosa en el ámbito institucional, jurídico y nacional, con la colaboración de un grupo de padres de judokas, el Prof. Céspedes fundó la Federación Formoseña de Judo el 15 de febrero de 1983 y la afilió posteriormente a la Confederación Argentina de Judo.
Actualmente, el Judo formoseño, a través de sus luchadores, directivos y técnicos, es un protagonista importante en el ámbito nacional y sus competidores son permanentemente convocados para integrar los Seleccionados Argentinos luego de clasificar en los Topes Nacionales.